La gerontogimnasia es un término cada vez más popularizado y muy vinculado al paradigma del envejecimiento activo y a la vida de las personas mayores en general. Os contamos en qué consiste la gerontogimnasia y cómo la aplicamos en la Residencia Otxartaga.
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LA GERONTOGIMNASIA: LA GIMNASIA DESTINADA A LA TERCERA EDAD
El ejercicio físico es uno de los pilares sobre el que asienta el envejecimiento activo y saludable. Sin embargo, no toda actividad física es extrapolable a los adultos mayores, dadas sus características corporales. Entonces, surge la gerontogimnasia como un tipo de dinámicas de ejercicio físico orientada a la tercera edad.
En efecto, la gerontogimnasia tiene como prioridad mantener a las personas mayores sanas y activas, a fin de evitar su deterioro físico y aumentar su autonomía personal. Y es que, con la edad, las personas vamos perdiendo masa muscular y los huesos se tornan frágiles y las articulaciones se rigidizan. De ahí que aplicando sesiones regulares de actividades físicas concretas, los adultos mayores pueden recuperar potencia muscular y mayor elasticidad corporal.
En este sentido, las sesiones de gerontogimnasia se muestran como un recurso fantástico para promover la buena forma física en las personas mayores. Y, con ella, mejorar su salud mental y su estado emocional, toda vez que se sienten más válidos y su autoestima se refuerza. Lo que, como veis, repercute favorablemente en la calidad de vida y el bienestar general de nuestros mayores.
Asimismo, la gerontogimnasia, al ser un programa de ejercicios adaptado a las personas de más de 65 años, resulta atractiva y fácil de seguir para ellas. Con lo que conseguimos fomentarles el hábito del ejercicio físico constante y alejarlos del temido sedentarismo, que tanta discapacidad y dependencia genera en ellos.
A continuación, os compartimos cuáles son todos los beneficios que otorga esta actividad. Además de comentaros cómo la implementamos esta clase de gimnasia en nuestra residencia y centro de día, dentro de nuestro programa de actividades físicas de mantenimiento diario.
LOS BENEFICIOS DE LA GERONTOGIMNASIA
La gerontogimnasia resulta muy necesaria para que los mayores mejoren su movilidad, su resistencia muscular, su fuerza, su equilibrio y su postura. Pues, sabido es que durante el envejecimiento las personas adolecen de mayor debilidad, rigidez, dolor, alteraciones del equilibrio y propensión a las caídas. Aspectos que deben ser atendidos con ayuda de ejercicios físicos específicos e incluso, fisioterapéuticos.
En este sentido, ejercitando su cuerpo a través de diversas áreas, con la gerontogimnasia se consiguen muchos avances en cuestiones de salud y bienestar personal. Por ejemplo:
- Introducir hábitos saludables que contrarrestan el deterioro físico durante la vejez.
- Permitir el adquirir mayor flexibilidad y agilidad de movimientos en el adulto mayor, facilitando la realización de las actividades básicas de la vida diaria.
- Corregir las deficiencias funcionales, posturales y del aparato locomotor, y, con ellos, los problemas en la marcha que pueda haber.
- Ejercitar las articulaciones para aminorar cualquier riesgo de discapacidad o dependencia física.
- Prevenir o ralentizar la aparición de enfermedades asociadas a las articulaciones como: artrosis, osteoporosis o la artritis, de gran incidencia en los mayores.
- Mejorar la circulación y con ello disminuye la posibilidad de enfermedades circulatorias
- Reducir los índices de dolencias cardiovasculares, diabetes e hipotonía muscular, entre otras.
- Fomentar el bienestar psicológico y anímico, al aumentar la capacidad de autonomía personal, así como favorece las relaciones sociales y la vida comunitaria.
- Proteger a los mayores de sufrir las consecuencias del sedentarismo o la inactividad que, si no se revierte, evolucionará a una situación de dependencia.
Se trata de una gimnasia agradable, fácil de realizar incluso para las personas poco deportistas. Y totalmente adaptada a las características físicas y fisiológicas que presentan los adultos mayores.
QUÉ TIPO DE EJERCICIOS SE REALIZA CON LA GERONTOGIMNASIA
La gerontogimnasia trabaja cíclicamente tres áreas básicas de la salud física de las personas mayores. A saber:
- La propiocepción y la potencia muscular: a fin de recuperar o retardar la pérdida de masa y fuerza muscular. Lo que favorecerá la movilidad y autonomía.
- El mantenimiento de las articulares: para tener más agilidad, flexibilidad de movimientos y mayor autonomía personal.
- La estabilidad: para reforzar el dominio del equilibrio y evitar caídas de consecuencia graves. Además, un buen manejo de la estabilidad permite llevar a cabo las actividades de la vida diaria con mayor seguridad.
En este aspecto, la gerontogimnasia tiene muchos puntos en común con la fisioterapia para mayores, de hecho se complementan muy bien.
Ahora bien, toda sesión de gerontogimnasia debe contemplar ejercicios destinados a reforzar la movilidad y la flexibilidad de cinco zonas corporales específicas. De ahí que toda sesión incluya ejercicios de cabeza y cuello, hombros y brazos, tronco, manos y mulecas y piernas y pies.
NUESTRAS SESIONES DE GERONTOGIMNASIA
Tanto en nuestra residencia como en nuestro centro de día realizamos sesiones de gerontogimnasia diarias para cada grupo de mayores. Esto es, en función de su grado de autonomía o sus limitaciones físicas. Las sesiones son desarrolladas en grupo, a fin de promover la participación y la motivación de los mayores, y duran una media hora aproximadamente.
Si hace frío o mal tiempo, realizamos la gerontogimnasia en nuestro salón central, con los mayores sentados cómodamente en las butacas o en sus propias sillas de ruedas. Pero si hace sol, como sucede en este mes de mayo, salimos todos a la terraza de que tenemos en nuestra residencia.
Así, mientras respiramos aire puro y aumentamos nuestros niveles de vitamina D, tan importante para las personas de edad avanzada, comenzamos la gimnasia. ¡Sin duda, los días soleados estimulan mucho a nuestros residentes y usuarios del centro de día a moverse e implicarse en estas sesiones físicas!
QUÉ HACEMOS DURANTE CADA SESIÓN DE GIMNASIA
En cada sesión llevamos a cabo diversos ejercicios de movilización, comenzando por la cabeza y el cuello y terminando con los pies. Siempre intentamos que la posición de inicio sea la siguiente: sentados en una silla, con las plantas de los pies apoyadas en el suelo y la espalda recostada sobre el respaldo de la silla. A continuación, relajamos las manos y los brazos y apoyamos las palmas en los muslos. Y empezamos con los movimientos suaves de cabeza y de cuello, en repeticiones de 10.
Posteriormente, trabajamos con los hombros y los brazos. Haciendo elevaciones de ambos, rotaciones de hombros y posición de los brazos en forma de cruz, con 10 repeticiones para cada movimiento. Seguimos con la apertura y cierre de manos y la rotación de muñecas. Pasamos a ejercitar el tronco, girándolo lentamente o inclinándonos hacia adelante con suavidad, intentando tocar el suelo con los dedos. Por último, trabajamos la movilidad de piernas y pies con giros de tobillos, y elevaciones de la pierna con la rodilla estirada o flexionada.
En ocasiones, para añadirle más diversión a estas sesiones de gimnasia ponemos músicas que a nuestros mayores les apasione y les animamos a cantar en coro.
Las actividades de gerontogimnasia, además de sencillas, pueden ser muy amenas. Ese ha de ser siempre nuestro objetivo: que los mayores disfruten del ejercicio físico, para que se auto-motiven a practicarlo a diario.
TRABAJANDO POR EL BIENESTAR DE LAS PERSONAS MAYORES
En toda actividad o psicoactividad que realizamos con los adultos mayores siempre hemos de procurar incrementar su bienestar en todos los niveles posibles. En el caso de las sesiones de gerontogimnasia, no solo buscamos mejorar su rendimiento físico, sino también favorecer su salud psicológica o sus funciones cognitivas. Y, simultáneamente, que disfruten de la participación social. En suma, que perciban las sesiones de gimnasia como un momento de bienestar y esparcimiento.
Sin duda, el resultado de adquirir el hábito de ejercitarse diariamente se verá reflejado en su buen estado de salud global —es decir, bio-psico-social—. Pero, sobre todo, en su capacidad por seguir manteniendo un estilo de vida independiente y activo.
De ahí que en la residencia y centro de día Otxartaga, la gerontogimnasia, así como otras disciplinas físicas, sea un recurso ineludible de nuestro programa de actividades. Pues, gracias a ellas, nuestros mayores derrochan salud, calidad de vida, autonomía personal y una actitud entusiasta para aprovechar cada nuevo día. ¿Se puede pedir más?
REFERENCIAS CONSULTADAS
- Fisalia (s/f). Gerontogimnasia, ejercicios para mayores sin salir de casa. Recuperado de https://bit.ly/3oW75Te
- Rosado Álvarez, M. M. & al. (2017). La Gerontogimnasia. Recuperado de https://bit.ly/3uwI2Y1
- Santos Pastor, M. L. & al. (2009). Condición física y salud: un modelo didáctico de sesión para personas mayores. Recuperado de https://bit.ly/3up1W7n
Redactora creativa. En la Universidad de Vigo obtuve un título en Economía, en la Escuela Elisava de Barcelona cursé un posgrado en Creatividad y Publicidad, y entre libros y talleres de escritura creativa aprendí a escribir. Trato de enfocarme en lo que marcas y clientes buscan, aportando mi estilo, trato de hacer llegar el mensaje de marcas y clientes a los lectores.
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