Las fiestas de Ortuella, particularmente las que honran a San Félix de Cantalicio, son un evento muy esperado todos los años por vecinos y visitantes. Y nuestra Residencia Otxartaga no es una excepción. Este año no solo celebramos estas festividades con gran entusiasmo, sino que también organizamos una serie de actividades que tuvieron un impacto muy positivo en nuestros mayores. Especialmente ante la aparición de fenómenos como el de la astenia primaveral, sobre el cual hablamos en nuestro último post. Y es que no hay nada mejor que una buena fiesta rodeada de amigos, llena de diversión y participación activa, para combatir esa sensación de fatiga y debilidad que afecta a muchas personas debido al cambio de estación. Desde un torneo de la rana hasta un bingo musical, pasando por un mikado y muchas sorpresas más, nuestros residentes disfrutaron de unos días repletos de momentos felices. Porque no olvidemos que estas actividades no solo brindan entretenimiento, sino que también promueven la socialización y el desarrollo de capacidades cognitivas, demostrando una vez más la importancia de mantener una vida activa y socialmente conectada.
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San Félix de Cantalicio
Aunque nacido en la localidad italiana de Cantalicio en 1515, San Félix ha sido adoptado como patrón por la localidad de Ortuella debido a su ejemplo de humildad, caridad y dedicación al servicio de los demás. La relación entre San Félix y Ortuella se remonta a tiempos antiguos, cuando los habitantes de la localidad buscaron en él un modelo de vida piadosa y un protector espiritual. Y es que el hoy patrón de Ortuella no solo provenía de una familia humilde, sino que cuando sintió la llamada de la fe, se unió a los Capuchinos, una rama reformada de los Franciscanos conocida por su estricta observancia de la pobreza y la simplicidad.
La devoción a San Félix en Ortuella se. Los habitantes de Ortuella vieron en la figura de San Félix a un hombre sencillo que dedicó su vida a ayudar a los más necesitados, un reflejo de valores entre los que destacan la humildad, la caridad y el servicio a los demás. Esta conexión espiritual se consolidó con el tiempo a través de la tradición y la fe popular.
Cada año, durante las fiestas de Ortuella, se rinde homenaje a San Félix con celebraciones que van más allá de los religioso. Acciones que no solo honran la memoria de San Félix, sino que también refuerzan el sentido de comunidad y solidaridad entre los habitantes de Ortuella. Así, San Félix de Cantalicio se ha convertido en un símbolo de unidad para todos los ortuellanos.
Beneficios de las actividades para los mayores
Las actividades organizadas durante las fiestas de Ortuella en Otxartaga han demostrado tener numerosos beneficios que van desde lo cognitivo hasta lo físico, pasando por lo social.
- Desarrollo de capacidades cognitivas. Las actividades cognitivas son esenciales para mantener la mente activa y prevenir el deterioro mental. Juegos como el bingo musical, el mikado y el tetris no solo garantizan momentos de diversión, sino que también estimulan el cerebro. Requieren atención, memoria y habilidades de resolución de problemas, lo que ayuda a mejorar estas capacidades cognitivas. El bingo musical fomenta que los mayores recuerden melodías y las asocien con diferentes elementos del juego, lo que estimula tanto la memoria auditiva como la visual, mientras que el mikado, al requerir precisión y estrategia para recoger los palillos, favorece la concentración y la coordinación entre la mano y el ojo.
- Salud y actividad física. Muchas de las actividades organizadas también implicaron un movimiento físico beneficioso para la salud general. El torneo de la rana requiere coordinación y destreza para lanzar las fichas, lo que ayuda a mantener la movilidad y la agilidad. Y es que como no nos cansamos de recordar, la actividad física regular es crucial para mantener la salud cardiovascular, la fuerza muscular y la flexibilidad. Además liberamos endorfinas, que mejoran el estado de ánimo y proporcionan una sensación de bienestar.
- Socialización. Muy relacionada con la sensación de bienestar está la socialización, fundamental para el bienestar emocional y psicológico de las personas mayores. Actividades grupales como los juegos proporcionan oportunidades para interactuar con otros, lo que alienta la creación de vínculos y amistades cruciales para combatir la soledad y el aislamiento, problemas comunes en la tercera edad. La compañía y el apoyo emocional pueden mejorar significativamente el estado de ánimo y reducir los niveles de estrés y ansiedad.
Juegos tradicionales… y no tan tradicionales
Durante las fiestas de Ortuella, la Residencia Otxartaga se llenó de diversión y entusiasmo gracias a una serie de juegos que hicieron las delicias de nuestros mayores. Desde los clásicos que han pasado de generación en generación hasta adaptaciones modernas pensadas para estimular tanto el cuerpo como la mente, los residentes pudieron disfrutar de una variada oferta de entretenimiento.
Torneo de la rana
El juego de la rana es un clásico juego de feria que nos sigue conquistan generación tras generación. Consiste en lanzar pequeñas fichas de metal hacia una tabla de madera que tiene varios agujeros y una figura de una rana de metal en el centro. La rana tiene la boca abierta, y el objetivo es lograr que las fichas entren en su boca para ganar puntos.
- Primero se coloca la tabla de madera con la rana en un lugar plano, y los jugadores se sitúan a una distancia determinada de la misma.
- Cada jugador recibe un número determinado de fichas de metal, generalmente 10.
- Los jugadores lanzan por turnos las fichas intentando introducirlas en la boca de la rana o en los otros agujeros de la tabla.
- Cada agujero tiene una puntuación diferente; el mayor de ellos, claro está, el de la boca de la rana. Al final de los lanzamientos se suman los puntos obtenidos.
- El jugador con la mayor puntuación después de todos los lanzamientos es el ganador.
Este juego mejora la coordinación y la precisión, además de ser una actividad divertida y social. Y si lo convertimos en una competición en forma de torneo, se convierte además en una herramienta de superación y sana competitividad.
Mikado
El mikado o juego de los palillos chinos es un juego de destreza en el que se emplea un conjunto de varillas delgadas de plástico o de madera en el cual cada varilla tiene un valor de puntos diferente, indicado por marcas o colores.
- Para empezar se agrupan todas las varillas en un manojo, se sostienen verticalmente sobre una superficie plana y luego se sueltan para que caigan y se dispersen.
- Los jugadores, por turnos, deben recoger una varilla sin mover las demás.
- Cada varilla tiene un valor de puntos diferente. Al final del juego, se suman los puntos de las varillas recogidas por cada jugador.
- El jugador con la mayor puntuación es el ganador.
El mikado ayuda a mejorar la concentración, la paciencia y la coordinación mano-ojo.
Tetris al aire libre
El tetris al aire libre es una adaptación del famoso juego de rompecabezas electrónico en el que los jugadores manipulan bloques geométricos para crear líneas horizontales sin huecos. En su versión al aire libre, los bloques son de gran tamaño y los jugadores deben moverlos físicamente para encajarlos en un área designada. Entre sus beneficios destacan los siguientes:
- Cognitivo. Al igual que la versión electrónica, el tetris al aire libre estimula la agilidad mental, la planificación y la resolución de problemas. Los jugadores deben anticipar y visualizar cómo encajarán los bloques para completar las líneas.
- Físico. Manipular bloques grandes requiere un movimiento físico que mejora la coordinación motora, la fuerza y la flexibilidad. Es, por tanto, una actividad que combina ejercicio físico con desafío mental.
- Social. Este juego también promueve la colaboración y el trabajo en equipo, ya que los jugadores pueden ayudarse entre sí para mover los bloques y encontrar la mejor manera de colocarlos.
Momentos irrepetibles que deseamos revivir una y otra vez
Durante las fiestas de Ortuella, la Residencia Otxartaga organizó una serie de actividades especiales que se convirtieron en momentos memorables para nuestros mayores. Entre las diversas opciones, dos destacaron particularmente por su popularidad y el entusiasmo que generaron entre los mayores: el bingo musical y el original y divertido photocall portátil.
Bingo musical
El bingo musical fue una de las actividades más populares durante las festividades en la Residencia Otxartaga. Esta versión del tradicional bingo sustituye los números por fragmentos de canciones conocidas. Los residentes recibieron tarjetas con los títulos de las canciones y, a medida que se reproducían los fragmentos, debían marcar las canciones que reconocían en sus tarjetas. La emoción aumentaba con cada canción, creando un ambiente vibrante y lleno de energía.
El bingo musical ofrece una combinación única de entretenimiento y estimulación mental. Cognitivamente ayuda a mejorar la memoria auditiva y el reconocimiento musical, ya que los participantes deben recordar y asociar las melodías con los títulos. Socialmente fomenta la interacción y la comunicación entre los residentes, quienes disfrutan comentando las canciones y compartiendo recuerdos asociados a ellas. Esta actividad también proporciona un sentido de logro y satisfacción, especialmente cuando se logra completar una tarjeta de bingo.
El photocall portátil
Como es natural, algunos de nuestros mayores presentan dificultad a la hora de moverse. Ante esto, ¡qué mejor solución que un photocall portátil que vaya hasta donde ellos estén!
El photocall portátil fue un gran éxito, permitiendo a los mayores hacerse divertidas fotos como las que os mostramos. Esta actividad no solo proporcionó entretenimiento, sino que también permitió a los residentes capturar momentos especiales y crear recuerdos duraderos. El acto de posar para fotos y ver los resultados generó muchas risas, fomentando un ambiente alegre y positivo. Además, las fotos tomadas durante el photocall se convertirán en preciosos recuerdos que los residentes y sus familias podrán atesorar, celebrando así la participación y el espíritu festivo de las fiestas de Ortuella.
Celebrando la vida juntos
Las fiestas de Ortuella han dejado una huella profunda en el corazón de nuestra comunidad en nuestra Residencia Otxartaga. Cada actividad y cada risa compartida nos ha recordado la importancia de que los momentos son más dulces si los celebramos juntos.
Estas experiencias nos han demostrado el valor de mantenernos activos y conectados, y nos han llenado de un renovado espíritu de esperanza y alegría. Miramos hacia el futuro con ilusión, sabiendo que cada nueva festividad nos brindará la oportunidad de crear más recuerdos entrañables y fortalecer aún más los lazos que nos unen.
Mientras los ecos de estas festividades aún resuenan en nuestros pasillos, ya empezamos a soñar con las próximas celebraciones. Invitamos a todos los residentes, familiares y amigos a que estén atentos a nuestras próximas actividades y se unan en estos momentos especiales. Por nuestra parte solo cabe desear que la espera sea corta y que la próxima celebración traiga consigo nuevas oportunidades para compartir, reír y disfrutar de la vida en comunidad.
Referencias consultadas
- Wikipedia (s/f). San Félix de Cantalicio. Recuperado de https://bit.ly/3WW7RTe
- Wikipedia (s/f). Palitos chinos. Recuperado de https://bit.ly/3R0qdic
- Wikipedia (s/f). Sapo (juego). Recuperado de https://bit.ly/3wQpqtl
- Fundación F.A.S.S. (s/f). Los beneficios y las dificultades de las actividades de ocio con las personas mayores. Recuperado de https://bit.ly/3WYpeTI
Redactora creativa. En la Universidad de Vigo obtuve un título en Economía, en la Escuela Elisava de Barcelona cursé un posgrado en Creatividad y Publicidad, y entre libros y talleres de escritura creativa aprendí a escribir. Trato de enfocarme en lo que marcas y clientes buscan, aportando mi estilo, trato de hacer llegar el mensaje de marcas y clientes a los lectores.
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