En la Residencia Otxartaga comprendemos la importancia de mantener un ambiente vibrante y enriquecedor para nuestros mayores. Conscientes de los desafíos emocionales que pueden surgir con el paso de los años, como explicábamos en nuestro anterior post sobre el síndrome del nido vacío, donde los hijos abandonan el hogar familiar, buscamos ofrecer un entorno donde cada persona se sienta parte de una comunidad cálida y activa. En este contexto, la actividad intergeneracional se erige como un pilar fundamental. Esta práctica no solo promueve la interacción entre diferentes edades, sino que también nutre el espíritu y fortalece los lazos afectivos. En nuestra residencia abrazamos la diversidad generacional como una oportunidad para aprender, compartir y crecer juntos. Hoy exploraremos cómo nuestras iniciativas de actividad intergeneracional están transformando positivamente la experiencia de nuestros mayores y de quienes participan en ellas.
Contenidos
La actividad intergeneracional entre niños y mayores
Las actividades intergeneracionales que llevamos a cabo en la Residencia de Ancianos Otxartaga con los niños del San Félix Ikastola de Ortuella están diseñadas para promover la interacción y el intercambio de experiencias entre generaciones. Estas actividades van más allá de simples encuentros, ya que buscan fomentar la comprensión mutua y el enriquecimiento personal.
Beneficios de las actividades intergeneracionales
Las actividades intergeneracionales entre niños y mayores en la Residencia Otxartaga ofrecen una amplia gama de beneficios tanto para los mayores que viven en nuestra residencia como para los niños que nos visitan.
- Aprendizaje de valores y respeto por los mayores. Los niños y jóvenes aprenden valores importantes como el respeto, la empatía y la solidaridad al interactuar con personas mayores, lo que contribuye a su desarrollo personal y ético.
- Transmisión de conocimientos y preservación de la historia y la cultura. Las interacciones intergeneracionales permiten la transmisión de conocimientos, historias y tradiciones de una generación a otra, lo que contribuye a preservar la historia y la cultura de la comunidad. Esto ayuda a los jóvenes a comprender y apreciar su herencia cultural, mientras que los mayores se sienten valorados por su papel como guardianes de la tradición.
- Desarrollo de habilidades de comunicación y liderazgo. Las actividades intergeneracionales ofrecen un entorno donde los participantes pueden practicar y desarrollar habilidades de comunicación efectiva, así como aprender a liderar y trabajar en equipo. Estas habilidades son valiosas tanto en el ámbito personal como profesional, y contribuyen al crecimiento personal y profesional de los participantes.
- Promoción de bienestar emocional y autoestima. La participación en estas actividades puede aumentar la autoestima y el bienestar emocional tanto en los mayores como en los pequeños. El sentido de pertenencia y conexión que se desarrolla a través de estas experiencias puede mejorar el estado de ánimo y proporcionar un sentido de propósito y satisfacción.
- Fortalecimiento de los lazos familiares y comunitarios. Las actividades intergeneracionales crean oportunidades para fortalecer los lazos familiares entre los residentes mayores y sus familiares, así como entre los niños y sus abuelos. Además, contribuyen a la cohesión social en la comunidad al promover la interacción positiva entre personas de diferentes edades y trasfondos.
- Fomento de la empatía y la comprensión entre generaciones. Las actividades intergeneracionales fomentan una mayor comprensión y aprecio por las diferentes perspectivas de vida, las cuales promueven la empatía y la comprensión entre generaciones y fortalecen los lazos familiares y comunitarios.
Beneficios físicos y mentales
- Estímulo cognitivo y socialización. Las interacciones intergeneracionales ofrecen un intercambio de conocimientos y habilidades que estimulan el desarrollo cognitivo de los participantes, al tiempo que promueven la socialización y la integración en la comunidad.
- Mejora de la salud mental y emocional de los residentes mayores. Participar en actividades intergeneracionales proporciona a los mayores un sentido de vitalidad y conexión con el mundo exterior, mejorando así su bienestar emocional y calidad de vida.
Ejemplos de actividades intergeneracionales
Aunque en Otxartqaga preparamos y estructuramos de manera cuidada las actividades que realizamos en nuestra residencia, es posible llevar a cabo en casa algunas similares. Disfrutar en familiar de una actividad intergeneracional es mucho más fácil de lo que parece.
Actividad intergeneracional en interiores
- Juegos de mesa. Los juegos de mesa son una forma divertida de unir a la familia. Juegos como las damas, las cartas o el dominó son excelentes opciones que pueden adaptarse a diferentes edades y habilidades.
- Artes y manualidades. Realizar proyectos de arte y manualidades juntos es una manera creativa de pasar tiempo en familia. Desde pintura y dibujo hasta hacer manualidades con materiales reciclados, hay muchas opciones para explorar juntos la creatividad. Además, lo que preparamos pueden tener usos diversos, o ser el disfraz que nos vistamos en los siguientes carnavales, como hemos hemos hecho nosotros este año.
- Cocinar juntos. Preparar una comida o postre juntos es una excelente manera de fomentar la interacción y el aprendizaje mutuo. Los mayores pueden compartir recetas familiares y técnicas de cocina, mientras que los niños aprenden habilidades culinarias y disfrutan de pasar tiempo en la cocina.
- Juegos de preguntas y respuestas. ¿Por qué no organizar juegos de preguntas y respuestas sobre la historia familiar o temas de interés común? Esta es una manera excelente de fomentar la conversación y el intercambio de conocimientos entre generaciones.
- Lectura compartida. Leer juntos libros o cuentos es una actividad relajante que también fomenta la comunicación y el vínculo emocional. Los mayores pueden compartir sus libros favoritos de la infancia, mientras que los niños pueden compartir sus cuentos actuales preferidos.
Actividad intergeneracional al aire libre
- Jardinería. Plantar y cuidar un jardín es una actividad gratificante que puede disfrutarse en familia. Y si no, que nos lo digan a nosotros, que tanto disfrutamos de nuestro huerto. Los mayores pueden compartir su experiencia en el cuidado de las plantas mientras los niños aprenden sobre la naturaleza y la responsabilidad.
- Ejercicio físico. Hacer ejercicio juntos es una forma saludable y divertida de pasar tiempo en familia. Pueden dar paseos juntos, practicar yoga o incluso bailar en casa.
Cocinoterapia en Residencia Otxartaga
La cocinoterapia, una forma innovadora de terapia que utiliza la cocina y la preparación de alimentos como herramientas terapéuticas, se convierte en un vínculo poderoso en el contexto de la actividad intergeneracional.
Esta práctica no solo se trata de cocinar juntos, sino que también se centra en el proceso compartido de crear, compartir y disfrutar de alimentos.
Para los residentes mayores, la cocinoterapia ofrece una oportunidad para revivir recuerdos asociados con la cocina y compartir sus habilidades culinarias con las generaciones más jóvenes. Los niños, a su vez, aprenden sobre la importancia de la alimentación saludable y adquieren habilidades prácticas mientras interactúan con sus mayores. Además de fomentar la comunicación y el trabajo en equipo, la cocinoterapia promueve una sensación de logro y satisfacción compartida al finalizar la preparación de una comida. Este intercambio de conocimientos y experiencias en la cocina no solo fortalece los lazos intergeneracionales, sino que también contribuye al bienestar emocional y físico de todos los participantes.
Postres para la cocinoterapia
Un postre tan sencillo y divertido como el que preparamos con los niños del San Félix Ikastola merece la pena repetirlo de vez en cuando. Así que desde Residencia Otxartaga lo compartimos con vosotros para que no dejéis de probar a hacerlo también en casa.
Brochetas de plátano, fresas y mandarinas con chocolate
- Reúne los ingredientes necesarios: plátanos, fresas, mandarinas y crema de avellanas líquida.
- Lava las fresas y las mandarinas, y pela los plátanos.
- Para montar las brochetas debes cortar los plátanos en rodajas de unos 2 centímetros. A continuación corta las fresas en mitades o cuartos, dependiendo del tamaño. Toma un palillo para brochetas y ensarta una rodaja de plátano, seguida de una fresa y luego un gajo de mandarina. Repite este proceso hasta que la frute ocupe dos tercios del palillo, alternando los ingredientes para crear una variedad de colores y sabores en cada brocheta.
- Decoración con crema de avellanas líquida. Una vez que todas las brochetas estén ensartadas, toma la crema de avellanas y decora las brochetas con líneas o puntos de chocolate. No abuses de ella, puesto que la fruta tiene ya suficiente azúcar, y queremos solo darle un toque, un contraste que no enmascare el delicioso sabor de la fruta. Otra opción es verter la crema en un recipiente pequeño y usar una cuchara o tenedor para salpicarla sobre las brochetas, o usar una manga pastelera para hacer líneas finas de chocolate sobre las frutas.
- Refrigeración opcional. Si lo deseas, puedes refrigerar las brochetas durante unos minutos para que la crema se solidifique ligeramente antes de servirlas. Esto ayudará a que el chocolate se adhiera mejor a las frutas.
- Una vez decoradas, coloca las brochetas en un plato o bandeja de servir y sírvelas de inmediato para disfrutarlas como postre o merienda.
Otras frutas que pueden incluir en tus brochetas, dependiendo de gustos, intolerancias o de la época del año en que las prepares son: piña, uvas, melón, kiwi, mango, peras, cerezas, sandía, manzanas, nísperos, melocotones o nectarinas, entre otras muchas. ¡Pon en marcha tu imaginación y déjate sorprender por la mezcla de texturas y sabores!
Fortaleciendo vínculos y construyendo comunidad
Las actividades intergeneracionales desempeñan un papel fundamental en la promoción del entendimiento, la solidaridad y el enriquecimiento mutuo dentro de las familias y comunidades. Al brindar oportunidades para que diferentes generaciones interactúen y compartan experiencias, estas actividades fortalecen los lazos y fomentan un sentido de pertenencia y conexión. Además, ofrecen un espacio para el aprendizaje mutuo, donde los mayores pueden transmitir conocimientos y valores a los más jóvenes, mientras que estos últimos aportan energía, perspectivas frescas y nuevas habilidades. Más allá de crear recuerdos entrañables y fortalecer relaciones afectivas, las actividades intergeneracionales contribuyen al bienestar emocional y social de todos los participantes, promoviendo un sentido de comunidad y colaboración. En un mundo cada vez más fragmentado, estas iniciativas juegan un papel crucial en la construcción de sociedades más inclusivas, donde cada individuo se siente valorado y parte de un tejido social cohesionado. Por lo tanto, es imperativo fomentar y apoyar la realización de actividades intergeneracionales, reconociendo su importancia en la creación de un futuro más unido y armonioso para todas las generaciones.
Referencias consultadas
- Canedo García, A. (2021). Relaciones internacionales: beneficios, satisfacción y limitaciones derivadas de la práctica de actividades presenciales y virtuales. Recuperado de https://bit.ly/3UPYYtH
- Senior Domo (s/f). La importancia de las relaciones intergeneracionales. Recuperado de https://bit.ly/48BOktP
Redactora creativa. En la Universidad de Vigo obtuve un título en Economía, en la Escuela Elisava de Barcelona cursé un posgrado en Creatividad y Publicidad, y entre libros y talleres de escritura creativa aprendí a escribir. Trato de enfocarme en lo que marcas y clientes buscan, aportando mi estilo, trato de hacer llegar el mensaje de marcas y clientes a los lectores.
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